Ferrari quiere conseguir su ansiado título mundial en 2019 tras quedarse muy cerca el año pasado. La Scuderia ha presentado públicamente el Fórmula 1 con el que pretende terminar con la hegemonía impuesta por Mercedes desde el comienzo de la era híbrida esta temporada: el SF90 que pilotarán Sebastian Vettel y Charles Leclerc.
El nuevo bólido de Ferrari construye sobre las bases asentadas durante pasadas temporadas, adaptando su filosofía a la nueva normativa técnica. Como en la mayoría del resto de equipos, los cambios principales están en el alerón delantero, aunque el diseño de Ferrari presenta diferencias en los aletines con respecto a lo visto hasta ahora. En cuanto a la decoración, el característico rojo pasa a ser mate.
Ferrari ha pasado por una serie de cambios importantes durante el invierno. La primera novedad reside en la alineación de pilotos, pues en Maranello apostaron por la juventud al subir a Leclerc para reemplazar a Kimi Raikkonen. Esta es la primera vez que Ferrari confía en su cantera para ocupar un asiento titular junto al cuestionado Vettel, que tendrá que subir el listón tras un decepcionante final de temporada.
Otro cambio relevante en la estructura de Ferrari fue el despido de Maurizio Arrivabene como jefe de equipo. Mattia Binotto resultó elegido para ocupar el puesto de mayor responsabilidad en la Scuderia, poniendo fin de esta forma a la lucha interna por el poder que se intensificó tras el repentino fallecimiento de Sergio Marchionne. Con energías renovadas, Ferrari planea un nuevo asalto al título en 2019 después de estar más cerca que nunca de lograrlo la pasada campaña, reseña Car and driver