Los octavos de final más largos de la historia de la Europa League verán su final después de más de cuatro meses con unas eliminatorias atípicas, marcadas por la crisis del coronavirus, en las que el Manchester United tendrá que cumplir un trámite ante el LASK, el Inter se enfrentará a un hueso como el Getafe y el Sevilla y el Roma disputarán el duelo más igualado.
Entre este miércoles y este jueves, ocho encuentros, seis de vuelta y dos a partido único, decidirán el nombre de los clubes que estarán en los cuartos de final de la competición tras un tiempo de incertidumbre provocado por una crisis sin precedentes en la historia del fútbol europeo y mundial.
El COVID-19 obligó a aplazar dos partidos de los encuentros de ida (Inter-Getafe y Sevilla-Roma) y dejó a medias el resto de eliminatorias. Y es que, el 12 de marzo, hace exactamente 145 días, se disputaron el grueso de los encuentros que daban inicio a los octavos de final de la Liga Europa con buenos resultados para algún favorito que tendrán que apuntillar a sus rivales en la vuelta.
Es el caso del Manchester United, que arrolló al LASK Linz austríaco con una victoria contundente (0-5) que sentenció la eliminatoria. Old Trafford será el escenario de un trámite en el que probablemente el técnico Ole Gunnar Solskjaer mezcle a jugadores importantes con menos habituales tras un mes en el que su equipo ha disputado hasta once encuentros oficiales.
El regreso de Paul Pogba y la inyección creativa aportada por Bruno Fernandes provocó que el United firmase sólo una derrota en su regreso (ante el Chelsea en las semifinales de la FA Cup). Su buen estado de forma se saldó con el premio de la tercera plaza de la Premier League que da acceso a jugar la próxima edición de la Liga de Campeones. Solskjaer no podrá contar con los lesionados Phil Jones, Luke Shaw y Axel Tuanzebe.
Además, una decisión del club inglés podría afectar a otro partido, el Sevilla-Roma, del que podría quedarse fuera Christopher Smailling. Cedido por el United, deberá regresar a su equipo de origen ante la falta de acuerdo para extender su contrato en el conjunto italiano y se unirá a las bajas de Lorenzo Pellegrini (rotura del tabique nasal) y de Jordan Veretout, ausente por sanción.
Sin duda, serán unas ausencias relevantes para una eliminatoria que se disputará a partido único en el Schauinsland-Reisen-Arena de Duisburgo (Alemania). En campo neutral y en sólo 90 minutos, el Sevilla y el Roma decidirán su pase a los cuartos de final. Y, ambos, lo harán en un buen estado de forma.
Últimos 8 encuentros del Roma
El Roma, aunque no se clasificó para la Liga de Campeones, llegará a la cita después ganar 7 de sus últimos 8 encuentros, cuatro de ellos seguidos. Jordan Veretout y Edin Dzeko, con 4 goles tras el parón y Henrikh Mkhitaryan y Nikola Kalinic, con 3, serán sus armas más peligrosas.
En el otro lado, el Sevilla rozó la tercera posición en LaLiga, pero la diferencia de goles con el Atlético le hizo ocupar la cuarta plaza. En 11 partidos tras la reanudación sólo ha encajado 5 goles y ya no podrá contar con Rony Lopes, fuera del club, y con Nemanja Gudelj, aislado por coronavirus. Lopetegui sí tendrá a su disposición al portero Tomas Vaclík, ya recuperado de una lesión.
El otro choque que se disputará a partido único, el Inter-Getafe, también se jugará en Alemania. En concreto, en el Veltins-Arena de Gelsenkirchen, escenario de un duelo entre dos equipos que llegan a la cita sensaciones extrañas.
El Inter, envuelto en un ambiente enrarecido por la explosión de su entrenador, Antonio Conte, que cargó duramente contra la cúpula de su club. Después de acabar la Liga en una digna segunda posición, recordó las críticas de sus dirigentes: «Alguno se sube al carro, pero la montaña de mierda ha caído sobre mí y sobre los jugadores… Cada uno ha mirado por su parcelita, sin protegerme a mí ni a los futbolistas», dijo Conte tras ganar al Atalanta.
Con ese panorama, el Inter deberá hacer frente a un hueso como el Getafe, que aunque llega en horas bajas después de ganar sólo uno de los once encuentros post-confinamiento, puede sacar a relucir su mejor versión para poner contra las cuerdas al Inter. Ya eliminó al Ajax en dieciseisavos y después de quedarse sin competición europea en los últimos minutos de LaLiga, intentará desquitarse en un duelo histórico.
Los choques en tierras alemanas se cierran con el Leverkusen-Rangers. En este caso, será el de vuelta y el cuadro germano tiene todas las de ganar tras el 1-3 que logró en la ida. Fuera de la Liga de Campeones en el último suspiro de la Bundesliga, la Liga Europa podría ser un premio para el Leverkusen, que será, si no hay sorpresas, el rival del Inter o del Getafe.
Los otros dos equipos alemanes en liza, el Wolfsburgo y el Eintracht, lo tendrán más difícil. Los primeros perdieron 1-2 ante el Shakhtar y deberán remontar en Ucrania, mientras que los segundos cayeron 0-3 frente al Basilea y necesitan un milagro en Suiza.
Habrá más igualdad en las otras dos eliminatorias. En la primera, el Olympiacos visitará el estadio del Wolves en Inglaterra después de empatar 1-1 en la ida. Se enfrentará a un equipo rabioso después de perder en la última jornada de la Premier la última plaza europea. Y en la segunda, el Baçakçsehir turco intentará aguantar su renta de un tanto (1-0) en el estadio del Copenhague. EFE