Brasil consiguió el jueves un agónico pase a semifinales de la Copa América-2019 al batir por penales 4-3 a Paraguay, tras empate 0-0 en los 90 minutos, rompiendo la maldición contra los guaraníes que en las ediciones 2011 y 2015 habían eliminado a la Seleçao desde los once metros.
Por Brasil anotaron Willian, Marquinhos, Coutinho y Gabriel Jesús logró el quinto y definitivo después de que Roberto Firmino errase el suyo.
Por Paraguay anotaron Miguel Almirón, Bruno Valdéz, Rodrigo Rojas. En tanto, el tiro del capitán Gustavo Gómez fue controlado por el golero Alisson y el atacante Derlis González, quien también había fallado contra Argentina en fase de grupos (1-1), desvió su remate.
De este modo, la Verdeamarela pasa a una semifinal después de 12 años de ausencia. La última vez fue cuando alcanzó su octava Copa América al vencer 3-0 a Argentina en la final de Venezuela-2007.
Brasil había perdido en definición por penales ante los guaraníes en cuartos de final en 2011 y 2015. Con este resultado, Tite acaba con el maleficio y se mantiene con opciones de ganar el torneo en su propia casa.
Paraguay jugó con 10 desde el minuto 58, por la expulsión con roja directa de Fabián Balbuena.
Pese a esa superioridad numérica, la anfitriona fue incapaz de hacerle un gol a los guaraníes en los 90 minutos de juego (no hay prórrogas en los cuartos de la Copa América), que se defendieron con todo en los últimos minutos.
«La muestra de carácter de hoy del equipo ha sido para sentirse orgulloso», dijo el DT de Paraguay, Eduardo Berizzo.
– La Seleçao propuso juego –
Brasil tuvo un inicio potente desde el primer minuto, pero poco a poco se fue complicando frente a un ordenado juego defensivo que le ofreció Eduardo Berizzo, que apostaba al contragolpe, principalmente por su lado derecho con Hernán Pérez y Derlis González.
La Canarinha se encontró de frente con una 5-4-1 que le complicaba el avance a Gabriel Jesús y a Everton, que por momentos cambiaban de banda para probar suerte.
«Es posible mejorar las combinaciones, a veces el adversario complica pero es posible. Pero es posible hacerlo si el gramado está bien», dijo el director técnico brasileño, Tite.
La nueva estrella de la ofensiva brasileña, tuvo problemas para pasar la férrea línea de defensa paraguaya, aunque fue el mejor de los locales, mientras que Gabriel Jesús estuvo desactivado.
A Philippe Coutinho le costó mucho filtrarse por entre Gómez, Balbuena y Alonso, y tuvo que replegarse en varias ocasiones para poder generar jugadas.
Por su banda, Filipe Luis cuidaba las espaldas de Everton en cada ataque, recuperando el balón.
Todo era válido para el gol. A los 22 minutos, un mal despeje del defensor Sánchez fue robado por un siempre atento Countinho que combina con Firmino, pero el ‘Gatito’ Fernández no se complicó.
Con las puertas paraguayas cerradas, Brasil se enredó.
– Paraguay despierta –
En un contragolpe a los 28 minutos, Hernán Pérez manda el balón para dentro del área brasileña, libre, y encuentra a Derlis González que domina con el pecho y lanza directo para el arco de Alisson. El portero del Liverpool se luce y salva a Brasil de una tragedia.
El juego se trababa y el estadio comenzaba a quedar intranquilo. Dos faltas con cartón amarillo para Paraguay (Arzamendia y Alonso) y una para Filipe Luis en la primera mitad, resumían el estado del juego.
Brasil erraba los pases, perdía balones y, aunque luego Marquinhos y Thiago Silva evitaban complicaciones, igual comenzaban algunos abucheos desde la tribuna.
Así se fueron al descanso.
– Un hombre menos –
El segundo tiempo arrancó igual de enredado.
A los 58 minutos Gabriel Jesus intenta entrar por el centro y la deja para Firmino, quien es derribado por Balbuena. El VAR dictamina que fue en la boca del área y se cobra un tiro libre. Pero era una falta del central como último defensor y se gana la expulsión.
Tite colocó en el campo a Willian y a Lucas Paquetá para buscar movilidad en el ataque.
A Paraguay no le queda otra que cerrar con todo y hace cambios para garantizar más defensa y llevar el juego a los penales, cosa que consiguió.
– A jugarse la vida –
Brasil empieza a presionar más por la banda izquierda. Gabriel Jesús, Firmino y Everton alteran posiciones. Iván Piris deja el alma en cada ataque que le cae encima. Por el medio, Coutinho no consigue nada.
Arthur y Thiago Silva intentan las personales desde fuera del área, pero la escuadra de Tite no conseguía cambiar el ritmo del juego.
A los 88, Coutinho cobra una falta por la izquierda y la centra en el medio del área. Alex Sandro remata de cabeza y un soberbio ‘Gatito’ ahoga el grito de gol de las 45.000 almas en el Arena do Gremio.
William, Everton y Coutinho intentaron hacia el final, sin éxito. Y el pase se decidió en los penales.