El Atlético ganó al Elche muy a su estilo, a su manera, perdonando la vida a su rival en el primer tiempo y sufriendo como pocas veces. Fidel, en los instantes finales, falló un penalti que pudo suponer el empate. El Atlético, que nunca ha tenido suerte con las penas máximas, respiró y se llevó tres puntos que pueden ser trascendentales. El líder sigue adelante y llegará al Camp Nou en lo más alto. Volvió a ofrecer dos versiones: una muy buena en el primer tiempo y otra peor en la recta final, con muchas dudas en defensa. El Elche, sin apenas crear peligro, pudo empatar. El agónico triunfo del Atlético le acerca al título.
El Atlético no se anduvo en esta ocasión con contemplaciones y salió desde el primer minuto decidido a llevarse los tres puntos. Marcó mediada la primera mitad pero pudo hacerlo mucho antes. Los del Cholo entendieron que había que ser valientes y meter desde el pitido inicial a su rival en su área. Así sucedió. Sólo viendo el planteamiento del técnico argentino ya se averiguaban las intenciones rojiblancas. Koke dejó su sitio en el once a Kondobgia, pletórico, siempre adelantándose al balón… Llegó como refuerzo tras la marcha de Thomas y Simeone quizá no le ha utilizado lo que debiera. Con Kondogbia ocupando campo, estando en todos los sitios, con Lemar y Marcos Llorente ayudándole a la hora de crear, y con Carrasco y Correa ensanchando el campo, el Atlético apenas le dio respiro al Elche.
El conjunto ilicitano poco pudo hacer ante la avalancha rojiblanca, con Carrasco especialmente activo. El belga desbordó una, dos, tres veces… Se sucedieron las oportunidades de gol del equipo madrileño. Suárez falló al poco de comenzar una de esas que normalmente manda dentro. Poco después el VAR anuló un gol al delantero uruguayo del Atlético. Por milímetros parecía adelantado el punta. Luego chutaron Kondogbia, Llorente, Lemar… Hasta que llegó el 0-1, con colada de Carrasco y pase de la muerte con remate de Llorente a la red. Al Atlético, parece mentira teniendo jugadores de tanta calidad adelante, le cuesta un mundo marcar, pero logró lo más difícil, ponerse por delante. El Elche apenas había tenido el balón y sólo pudo salir de su campo un par de veces, agobiados sus centrocampistas, sin margen para maniobrar ni siquiera a la contra.
El partido sí cambió un poco tras el tanto, con el Elche estirándose algo más y el Atlético contemporizando. Pudo sentenciar Carrasco pero se entretuvo delante del cancerbero local. Y al borde del descanso llegó una de las jugadas polémicas del encuentro cuando el colegiado Melero López señaló mano y tras verlo en el VAR corrigió su decisión. Nunca sabie nada si una mano es penalti o no.
Tras el descanso el encuentro fue diferente. El Atlético ya no se fue hacia la portería de un Elche, con Piatti en el campo para intentar darle creatividad a su equipo. Los del Cholo cedieron terreno ante un rival que tampoco llegó mucho, aunque cada balón colgado al área causaba peligro y nerviosismo en la zaga del Atlético. Mucha intranquilidad. El Cholo movió el banquillo, dio entrada primero a João Félix y posteriormente a Koke, con la idea de tener aún más el encuentro controlado. No pasó nada realmente importante de cara al espectador, con el Atlético esperando la ocasión de una contra.
Escribá le dio minutos a Nino, uno de los históricos de nuestro fútbol, confiando en que el delantero encontrar algún hueco entre la zaga rival. Nino honra la profesión y verle en un partido de este nivel siempre es de agradecer. Escribá quemó todas sus naves y el Atlético la tuvo en las botas de João Félix, pero Saúl le quitó finalmente el remate. La gran ocasión del Elche llegó a falta de tres minutos con un remate de Barragán que se fue alto. Susto para la defensa del Atlético, de nuevo fallona e imprecisa en el juego aéreo. Y justo al final llegaron las jugadas clave del partido. Primero una mano de Trippier, parecida a la que el colegiado no señaló a favor del equipo madrileño. Y el saque de la falta el colegiado pitó penalti a favor del Elche, pero Fidel la lanzó al palo. Un fallo que puede condenar al Elche y darle media Liga al Atlético. Un triunfo agónico para el líder.