El cubano Arlén López se impuso este miércoles en el combate final de boxeo semipesado masculino al británico Benjamin Whittaker para conquistar un oro para más Cuba en Tokyo 2020.
López, de 28 años, repite así la medalla de oro que obtuvo hace cinco años en Río 2016.
El púgil no cedió ninguno de los tres asaltos ante Whittaker y cuatro de cinco jueces le concedieron la victoria por puntos.
Cuba está luciendo en Tokio su repertorio de boxeadores en uno de sus deportes insignia en competiciones internacionales.
El logro de López se une al oro conseguido el martes por el cubano Roniel Iglesias en la categoría wélter. En peso ligero, el otro cubano Lázaro Álvarez ganó la medalla de bronce.
Cuba ya tiene 12 medallas en Japón: cinco de oro, tres de plata y cuatro de bronce.
«Dándole ‘alegrón’ al pueblo»
En la Arena Kokugikan de la capital nipona, se notaba quién ya había sido campeón olímpico.
López esperó los momentos perfectos, se movió por el ring como si bailara; esquivando golpes, asestando con precisión cuando Whittaker relajaba su defensa.
«Estamos muy contentos (en referencia a su familia y equipo) por el sacrificio que he hecho. Seguimos de pie, dándole alegrón al pueblo, a los familiares y a las personas que nos quieren», dijo López en la rueda de prensa posterior al combate.
El cubano no solo llegaba con la credencial de campeón olímpico en Río. También logró el Mundial de 2015, el oro en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 y en los Campeonatos Panamericanos de 2017.
En su carrera ha ganado 127 veces (20 por knockouts) y ha perdido 17 peleas.