El velorio ocurrió en el municipio de Cuautitlán Izcalli, en México lugar al que acudieron sin saber que saldrían contagiados con la enfermedad
A pesar de que la aplicación de la vacuna contra COVID-19 representa esperanza para mitigar el contagio de la enfermedad, las cifras de muertes y hospitalizaciones en México continúan siendo alarmantes. Se trata del cuarto país en el mundo con más fallecimientos acumulados por el virus SARS-CoV-2, con 140,704, según los datos recopilados por la Universidad John Hopkins.
Cada caso representa una historia, familias enteras han sufrido pérdidas o se han separado a causa del padecimiento. En una entrevista para el diario Milenio, José Martín Chávez Enríquez contó que luego de asistir a un funeral de un tío lejano, 16 de sus consanguíneos fallecieron por coronavirus.
“No he tenido tiempo ni de llorar, estoy como pasmado. Mi mamá murió antier, a mi papá todavía lo tengo enfermo en casa y mi hermana ya logró salir adelante. No sé de dónde me salen fuerzas para seguir adelante”, comentó al diario de circulación nacional.
El velorio ocurrió en el municipio de Cuautitlán Izcalli, en donde se reunieron para dar el pésame a los familiares de su tío; sin embargo, no sabían a lo que se exponían y muchos parientes se contagiaron.
“El virus arrasó, acabó con casi toda la familia, se fueron enfermando y muriendo. Mi mamá de 62 años estuvo en cama, pero se puso grave y la tuve que llevar al Hospital Vicente Villada y no logró sobrevivir. La incineré y tengo sus restos en mi casa porque ni tiempo de ir al panteón”. Además de este fallecimiento, también se encuentra el de su abuelo y tres de sus tíos directos, quienes luego de resultar positivos murieron a causa de la enfermedad.
Chávez Enriquez, quien es propietario de un Spa, comentó a Milenio que tuvo que disponer de sus ahorros para pagar los gatos médicos, de oxígeno y de medicina “he gastado como 80 mil pesos, mis demás familiares llevan gastados como 200 mil pesos”.
Aunque él también asistió al funeral, no contrajo el virus. No obstante, uno de los pesares más grandes para este fue no haber podido darle un buen sepelio a su madre, pues “todo es tan rápido, hay que incinerarlos, no se pueden enterrar”. “Accedí a la entrevista porque quiero que toda la gente se entere y vean lo importante es cuidarse y protegerse de esta enfermedad”, fue el comentario final que hizo al medio.
El pasado domingo 17 de enero, la Secretaría de Salud (SSa) registró 1,641,428 casos positivos y 140,704 muertes por COVID-19 a nivel nacional. En tanto, se contabilizaron 2,064,296 contagios negativos y 2,121,929 personas estudiadas desde que comenzó la transmisión viral en el país.
Adicionalmente, la SSa estimó que 108,550 (6%) pacientes presentaron síntomas en los últimos 14 días, lo cual representa a individuos que potencialmente contribuyen a la transmisión del virus. En la ocupación y disponibilidad hospitalaria hasta el 16 de enero, la Red Infección Respiratoria Aguda Grave (IRAG) indicó que existen 13,815 camas generales disponibles y 19,602 ocupadas. Con ventilador, a 5,999 pueden acceder los enfermos ante las 5,213 que están saturadas.
La entidad con mayor ocupación en camas de hospitalización general y con ventilador es la Ciudad de México, pues tiene una saturación de 88 y 86%, respectivamente.
Para atender a pacientes en situación crítica por COVID-19, Estado de México cuenta con 19% de disponibilidad, Nuevo León con 27%, Baja California con 41%, Tlaxcala con 42%, e Hidalgo con 49 por ciento. Otras 26 entidades federativas tienen más de 50% de lugares habilitados para atender a las personas que necesiten ventilación mecánica para recuperarse.
No obstante, existen buenas noticias en relación al reporte de inmunización. De acuerdo con la dependencia, en las últimas 24 horas han sido aplicadas 5,378 dosis del antígeno producido por Pfizer-BioNTech, con lo que se acumulan 468,708 vacunaciones contra COVID-19, reseña INFOBAE