Nusret Gökçe, más conocido como Salt Bae, se ha convertido en uno de los chefs más conocidos del mundo gracias a su icónico look, la manera un tanto artística con la que corta la carne y el curioso gesto que hace para añadirle sal gruesa al plato final. Una serie de características que han hecho que millones de personas compartan vídeos del chef turco haciéndose viral en todo el mundo.
El arte que tiene el chef para cocinar es innegable y su éxito ha hecho que abra restaurantes de lujo no solo en Estambul sino también en las ciudades más importantes del mundo como Dubái, Londres o Nueva York. Todos ellos de moda y muy solicitados por parte de los clientes más exigentes y los famosos más internacionales, incluso de algunos dictadores.
Sin embargo, el precio del restaurante no está al alcance de todos los bolsillos, ya que las sumas de dinero a las que asciende la cuenta final suelen ser desorbitadas. Tanto es así que recientemente se ha hecho viral la factura de unos comensales en Londres que ha desatado la polémica en redes por las cifras que maneja el restaurante de la capital británica.
La cuenta de la discordia asciende ni más ni menos que a 37.023,10 libras, unos 43.000 euros por una simple cena. Tras ver la cuenta, los usuarios de las redes sociales se han hecho dos preguntas: ¿Cómo es posible que algunas personas puedan permitirse una cena de 43.000 euros? y ¿De qué estaba hecha la carne para ser tan cara?
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Aunque los restaurantes de Salt Bae no son precisamente baratos, lo cierto es que esta cuenta en cuestión asciende a una cifra estratosférica en gran parte por las tres botellas de vino Petrus que suman 29.000 libras, unos 33.700, y otras dos de champán Don Pérignon que suman 1.900 euros más.
El escandaloso precio del vino ya ha sido motivo de polémica en redes, pero lo cierto es que la verdadera indignación ha llegado con el cargo de servicio, que en países como Reino Unido a veces es un 15% del total de la cuenta final. En este caso es de unos 6.000 euros, una cifra que ha indignado a muchos usuarios que aseguran que los trabajadores de los restaurantes de Salt Bae no están bien pagados.
El tuit ha dado la vuelta al mundo, haciéndose viral en solo unos días, pero a pesar de toda la polémica y las acusaciones de pagar muy poco a sus empleados, el chef no ha querido hacer declaraciones al respecto.
Con información de La Vanguardia