No creerás lo que concluye un estudio sobre comer tierra: «Es un remedio»

Eso afirma un estudio de la Universidad del Sur de Australia, antes de probarlo, lee muy bien todo.

Increíble, pero cierto. Un estudio de la Universidad del Sur de Australia concluye que comer tierra puede convertirse en un remedio perfecto para perder peso. Ni dietas bajas en carbohidratos ni ejercicio, como suena, zamparte arena, pero con matices… Según el investigador Tahnee Dening, la arena ayuda a absorber rápidamente la grasa del intestino: «Mientras investigaba la capacidad de la arcilla para la absorción de fármacos, descubrí que sus partículas atacaban la grasa y literalmente la absorbían».

«Todavía hay mucho que investigar, desde luego, pero potencialmente podría ser un remedio útil contra los problemas de obesidad», añadió. Pero si estás pensando en engullir a puñados la arena de la playa este verano, tienes que saber que no sirve cualquier tierra… Según Dening, tiene que ser arcilla montmorillonita, un mineral del grupo de los silicatos, con magnesio y aluminio.

Probado en ratas de laboratorio, que no en personas –atención, dato importante– se comprobó que todas perdían peso de manera rápida y sufrían menos efectos secundarios que con los tradicionales fármacos para adelgazar. Publicado en el Diario de Investigación Farmaceútica, el experimento duró dos semanas y mostró que la arcilla era tremendamente eficaz para absorber las grasas y los aceites presentes en los alimentos que ingerimos habitualmente. reseña men’s health