Hace 25 años, John Wayne Bobbitt salió en todas las portadas de los diarios de Estados Unidos, luego que su esposa le cortara el pene con un cuchillo. Ahora, el exsoldado de la Marina aseguró que el entrenamiento militar fue crucial para salir adelante y que ahora disfruta del mejor sexo de su vida.
Lorena Bobbitt, en la noche del 23 de junio de 1993 se levantó de su cama, fue hasta la cocina, tomó un cuchillo, regresó a su habitación y le cortó el pene a su esposo, publicó el portal web El Diario Nuevo Día.
Luego de cometer el crimen, condujo su automóvil por Manassas, Virginia y arrojó el miembro por la ventana.
Antes de huir, llamó a la policía para confesar lo sucedido. El señor Bobbitt fue trasladado de emergencia al hospital y tras encontrar el pedazo que le faltaba a su miembro viril, lograron coserlo en una intervención que duró más de nuevo horas.
La mujer confesó qué, horas antes del ataque, el hombre la había violado estando borracho.
Sin embargo, ambos fueron absueltos de todos los cargos en juicios sensacionalistas que acaparó la televisión y radio de los Estados Unidos.
En 1993, John fue declarado no culpable de violación y agresión, mientras que, en enero de 1994, Lorena fue absuelta de lesiones maliciosas por motivos de locura temporal y fue puesta en libertad después de 38 días en una institución mental.
Bobitt, luego de la operación, optó por convertirse en actor porno. Con fines profesionales, se llevó a cabo una operación de alargamiento peneano. No obstante, luego decidió revertir la operación porque “era bueno para las películas, pero las novias siempre se quejaban”.
“No he podido hacer el amor correctamente durante más de 20 años, pero ahora sí puedo”, aseguró Bobbitt que vive en Las Vegas junto a su novia Joni y un chihuahua.