Algunas tienen problemas de que nunca quisieran confesar. No obstante, hablar sobre éstos puede ser la mejor estrategia para encontrar una solución.
Si estás en una cita con la persona que te gusta, pero no le pones atención por estar preocupada por la cantidad de sudor que emanas, entonces estás experimentando una de las condiciones que más avergüenzan a las .
Sudor en exceso
Existen antitranspirantes diseñados para mujeres que sudan en exceso. Si no te funcionan, habla con tu médico para que descarte algún trastorno hormonal que requiera tratamiento especial.
Gases incómodos
Evita comer grandes cantidades de que favorecen la producción de flatulencias como coles, integrales y grasas. El cigarrillo y el estrés también las aumentan.
Si se convierte en un problema, habla con tu médico; tal vez tienes que hacer cambios drásticos en tu alimentación, eres intolerante a la lactosa o solo para descartar algún trastorno digestivo.
Problemas de digestión
Cuando padeces dolor de estómago, estreñimiento y/o diarrea, podrías tener el síndrome de intestino o colon irritable. Es una condición muy común, especialmente en las mujeres. Haz cita con un gastroenterólogo para que te evalúe.
Mal olor vaginal
La vagina es propensa a desarrollar infecciones por bacterias y hongos, debido a que es una zona. Sin embargo, existen cremas de venta libre que ayudan a controlar esas infecciones.
Otra causa del mal olor es la reacción al uso de jabones irritantes o de protectores diarios, entre otros. Lo más adecuado en este caso es hablar con tu ginecólogo para que te prescriba el tratamiento que realmente necesitas.
El mejor consejo es que no sufras en secreto y habla con tu médico sobre cualquier problema que te avergüence y que te hace pasar un mal rato. Seguramente dirás: “¿Por qué no busqué ayuda antes?”.
Fuente: Terra