Un equipo de buzos de Japón está intentando recuperar los restos de la tripulación de un avión hundido al suroeste de Japón y que participó en 1941 en el ataque contra Pearl Harbor, informó este martes un diario local.
El equipo, encabezado por Tetsuro Hayashi, comenzó a explorar en 2015 la zona en la que se haya sumergido el avión, situada entre Kyushu (suroeste), la tercera isla más grande del país, y el archipiélago de Okinawa, escenario de una de las batallas más sangrientas de la II Guerra Mundial.
El objetivo del buzo, según cuenta al diario nipón Asahi Shimbun, Hayashi, es conseguir recuperar los cuerpos de la tripulación para podérselos devolver a la familia antes del 15 de agosto, aniversario de la rendición de Japón en la II Guerra Mundial.
A unos 300 metros del cabo Kishigazaki, en el extremo norte de la isla Tanegashima (suroeste), la profundidad a la que se encuentra el aeroplano es de 18 metros lo que unido a las mareas fuertes limita las inmersiones a solo 20 minutos, dejando poco tiempo para explorar, explica el buzo, reseñó la agencia de noticias EFE.
Desde que inició esta exploración Hayashi ya ha realizado una docena de inmersiones junto a su equipo concluyendo que se trata de un bombardero de ataque tipo 97 usado por la Armada Imperial Japonesa.
Hayashi sostiene que el avión participó en el ataque contra la base naval de los Estados Unidos en Pearl Harbor en 1941, mientras que funcionarios del gobierno de la ciudad de Nishinoomote apuntaron también a su participación en un ataque kamikaze durante los últimos días de la Guerra del Pacífico, frente a Okinawa.
El Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar nipón, después de que el buzo les instase a investigar el asunto, ha determinado un periodo para llevar a cabo el trabajo necesario con el avión, justo hasta el 2024, un año antes del 80 aniversario del final de la II Guerra Mundial.