Escándalo por video de una fiesta con «mujeres chinitas» en una cárcel

Aunque parezca una broma, este caso es muy cierto. Y por esto, el propio director general de Centros Penales de El Salvador, salió este lunes a confirmar la celebración de una nudista en una cárcel de ese país llevado a cabo en 2012, y aseguró que ahora el Gobierno entregará información sobre esto a la Fiscalía para investigar y depurar responsabilidades.

El Video:

Todo salió a la luz, cuando un revelador, se viralizo por las . De esta manera, fue Hernández quien le confirmó a la prensa que entre el 24 y 25 de septiembre de 2012 ingresaron al recinto carcelario tres «bailarinas» y un equipo de música para la celebración.

El funcionario respondió así a la polémica generada por un vídeo difundido por medios locales en el que se observa a tres mujeres bailando desnudas entre decenas de peligrosos pandilleros.

La fiesta, organizada en el penal de Izalco (al oeste de El Salvador), fue supuestamente permitida por las autoridades, en el contexto de una tregua entre las pandillas, como prebenda para los malvivientes encarcelados a cambio de disminuir los homicidios entre ambas agrupaciones rivales.

Según Hernández, dicha celebración se dio durante la gestión de Nelson Rauda al frente de la Dirección General de Centros Penales (DGCP), durante la presidencia de Mauricio Funes (2009-2014).

El gran revuelo causado por el vídeo de esta fiesta llevó a la opositora Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) a pedir la remoción de Hernández, del entonces ministro de Seguridad y actual titular de Defensa, David Munguia Payes, y del Superintendente del Sistema Financiero, Ricardo Perdomo.

Por último, y de acuerdo con datos presentados por el ex jefe de Estado, Funes, el cese de hostilidades entre ambas bandas hizo que el promedio mensual de muertes violentas pasara de unas 340 a 160, mientras que el registro diario bajó de 15 a 5.

En tanto, diferentes sectores han señalado que los beneficios otorgados a los pandilleros reclusos fueron el traslado de líderes de la cárcel de máxima seguridad a una con menor régimen y el ingreso de televisores, teléfonos y prostitutas a los centros penales.

Fuente: Contexto Tucuman