Caramelos de jengibre, hojas de menta o o bolsas de orégano. Contras las dolencias leves en vacaciones
Es un momento tedioso para algunos y excitante otros. Nervios, olvidos, ilusiones… Hacer la maleta es todo un ritual. Lo importante es el destino. Y si va a la playa, no olvide el bañador. Pero su salud ha de estar siempre protegida: para ello existe el botiquín convencional. Sin embargo, se puede acompañar de productos naturales que también le aliviarán. He aquí un puñado de ellos para hacer más llevaderas dolencias leves en vacaciones.
Geranio: Esta planta no va en la maleta, pero puede poblar el salón mientras preparamos el equipaje. Actúa como relajante y su aceite esencial es muy utilizado en aromaterapia como remedio contra la ansiedad.
Jengibre: Funciona fenomenal como infusión o en caramelos para aquellos que sufren mareos cuando suben a un barco.
Papaya: Después de una larga cena con amigos, cambie su postre preferido por esta fruta tropical. Posee una enzima llamada papaína que le ayudara a tener una digestión más saludable.
Eucalipto: No olvide echar unas gotas de su aceite esencial cerca de la lámpara de la terraza donde cene estas vacaciones. El calor que ahí se fragüe impregnará la zona de su aroma, actuando como repelente de mosquitos.
Menta: Añada unas hojas de esta preciada planta a su jarra de agua fresca para convertirla en una bebida aún más refrescante. Si quiere reemplazar elementos esenciales que eliminamos con el sudor, se puede incorporar una cucharadilla de miel de Manuka y medio limón exprimido por litro de agua.
Manzanilla: Este eficaz antiinflamatorio natural puede ser muy útil en las picaduras de mosquitos e incluso de medusas. El responsable de esta actividad es uno de los componentes de su aceite esencial, el bisabolol, sustancia ampliamente utilizada en cosmética.
Avena: Si ha pasado demasiadas horas en la playa sin protección solar y su piel le está pidiendo a gritos ayuda, llene su bañera con agua tibia y esparza polvos de avena. Notará un alivio inmediato.
Lavanda: La eterna planta de múltiples propiedades se puede convertir en el mejor bálsamo curativo si aplica unas gotas de su aceite esencial en un bastoncillo de algodón en el caso de infecciones de oído externas y muy leves.
Orégano: Aquellos que prefieren la piscina a la playa no son ajenos a los dolorosos hongos de los pies. Si ha tenido la mala suerte de contagiarse, ponga en remojo los pies en agua tibia con 3 cucharadillas de orégano, por la mañana y por la noche, durante 5 días seguidos.
Calabaza: Sus semillas ricas en triptófano ayudan a conciliar mejor el sueño para aquellos que no consiguen un completo descanso antes del temido final de las vacaciones.