8 trucos que le ayudaran a eliminar el mal olor en los zapatos

Uno de los problemas con los que a veces tenemos que lidiar en nuestra vida cotidiana es con el mal olor de los zapatos. El problema en algunos casos es llevar una vida ajetreada en la que no paramos ni por un momento; nuestros pies sudan y ese mal olor se queda impregnado en el calzado que llevamos habitualmente, para eliminar el mal olor de los zapatos muchas veces no sólo es necesario emplear métodos naturales o costosos, sino también tratar  de manera local o interna el problema que originan el mal olor de los zapatos, ya sea por tener hongos en los pies, por la falta de ventilación del calzado o por bacterias que no permiten que el pie se mantenga saludable.

 

Como eliminar el olor de los zapatos
Una de las soluciones para eliminar el mal olor de los zapatos es meterlos en la lavadora pero esto puede tener varios problemas: el primero es que muchos calzados se pueden estropear si se lava de esta manera. Además, tardará mucho en secarse y seguramente los necesitemos al día siguiente.
Es por eso por lo que hemos recopilado unos trucos que nos van a venir estupendos.
Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio juega un papel fundamental a la hora de eliminar el olor de los zapatos. Utilizarlo es muy sencillo: tan solo tenemos que poner bicarbonato de sodio dentro de nuestro calzado durante toda la noche y esperar hasta el día siguiente. Otra opción es mezclar en partes iguales bicarbonato de sodio con zinc, de esta manera aprovecharemos las ventajas del zinc para eliminar bacterias el mal olor de los zapatos.
Cuando nos demos cuenta el olor habrá desaparecido completamente. Haz esto solo tres días y los tendrás como nuevos (internamente hablando), es recomendable.

 

Utilizando en congelador
¿Alguna vez has pensado en congelar tus zapatos? Por Internet circulaba un pequeño truco con el que conseguíamos aumentar un par de tallas del calzado tan solo con meterlos con bolsas en el congelador.
Pues esto también lo vamos a hacer para eliminar el mal “olor de los zapatos”. Déjalos toda la noche en él y nada más sacarlos ponlos al sol. Verás cómo funciona perfectamente.

 

Flores de lavanda
Las flores de lavanda se utilizan en las viviendas ya que su aroma ayuda a darle un aire de frescura a cualquier espacio de nuestro hogar. Tiene un olor muy penetrante que será capaz de eliminar cualquier mal olor que no deseemos.
Simplemente coloca estas flores de lavanda dentro de ellos y así podrás eliminar el olor de los zapatos e incluso ahora lo tendrás con aroma perfumado.
Arena para gato
Seguro que este truco para eliminar el mal olor de los zapatos no lo conocías. Llena dos calcetines o medias con arena para gato y deja que el olor se impregne en esta arena, durante toda la noche.
Por la mañana ponlos al sol para que este termine de secarlos. Cuando haya terminado, el olor habrá desaparecido completamente.

 

Fruta
Otra de las grandes ideas para neutralizar el olor de los zapatos es utilizar la piel de una fruta que sea muy cítrica. Debes introducirla dentro de una bolsa y esta, a su vez, dentro del calzado. Este aroma se encarga de eliminar cualquier mal olor de su interior.

 

Polvos de talco
Otra de las propiedades beneficiosas de los polvos de talco es que te van a ayudar a eliminar el mal olor de los zapatos. Llena el zapato de estos polvos durante toda la noche. Absorberá las humedades haciendo que huelan bien y que queden muy suaves en su interior, aunque es recomendado el uso de productos que luego no dañen la salud de tus pies, por ello puedes optar por talcos para bebés que son más suaves.

 

Aceites
Existen algunos tipos de aceites que son capaces de desinfectar la zona en donde van a ser aplicados, en nuestro caso nos estamos refiriendo al interior de nuestros calzados. Puedes encontrarlos en herboristerías o perfumerías. Para utilizarlo solo tienes que derramar un par de gotitas en las plantillas de los mismos y repetir dos veces a la semana.

 

Cambio de plantillas
Uno de los grandes motivos por los que se genera el mal olor de los zapatos es por tener una plantilla demasiado tiempo o descuidada. Asegúrate de mantener una buena higiene en esa zona y de ir renovando las plantillas para evitar que huelan mal.

 

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