En las relaciones sexuales, hay muchísimos terrenos donde el hombre y la mujer todavía tienen mucho por descubrir y lo cierto es que no sabemos si algún día ocurrirá.
Lo dudamos porque hay ciertas cosas que forman parte de la personalidad de cada uno, o de la propia esencia que la mujer o el hombre lleva consigo. En este terreno, hay espacios “muy resbaladizos”, como pueden ser los correspondientes a las “mentiras piadosas”. ¿Que cuáles son? Pues esas que las mujeres solemos decir o bien por vergüenza, o bien por no hacer sentir mal a nuestro chico, o por muchísimas otras razones.
Lo curioso de todo esto es que un altísimo porcentaje de mujeres siempre ha dicho alguna de las mentiras que vamos a enumerar a continuación. Insistimos, no nos gusta generalizar, pero una vez que las leas, dime: ¿De verdad nunca has dicho ninguna de ellas?
1- “Nunca he fingido un orgasmo“: No es que dudemos de tu palabra, pero es que esto en el caso de una mujer es prácticamente imposible. Según diferentes estudios, entre un 80-90% de las mujeres consultadas han fingido un orgasmo en alguna ocasión a lo largo de su vida. Lo anormal sería lo contrario. No te sientas extraña por ello.
2- “El tamaño no importa”: Para decir la verdad, la frase correcta sería algo así como que “el tamaño no lo es todo”, pero decir que no importa es completamente falso. Por supuesto que importa y mucho. Si lo dices, sueles hacerlo cuando quizás no quieres herir el ego de tu pareja, o de algún amigo. Hay que tener en cuenta también que a nosotras no nos gustan los extremos.
3- “No tengo sueños eróticos“: Por supuesto que todo el mundo ha tenido alguna vez un sueño erótico, quiera o no quiera. ¿Por qué muchas mujeres se empeñan en negarlo? ¿Por vergüenza? No tienes por qué sentir ni un ápice de vergüenza al respecto, quien diga lo contrario, miente.
4- “Nunca he visto una película porno”: Otra de las afirmaciones que mientras los hombres lo dicen con orgullo, nosotras podemos tener momentos en los que lo queramos esconder. No es necesario. Es normal tener curiosidad y más en terrenos sexuales. No hay nada malo en querer descubrir y experimentar.
5- No concibo el sexo sin amor: Vamos a ver, el sexo con amor es maravilloso. Confianza, respeto y pasión llevados a su máximo esplendor, pero tampoco está mal practicar sexo sin amor. No hay tampoco nada malo en ello. Respeto siempre, pero el amor no es necesario. Hay muchos prejuicios al respecto, pero lo cierto es que no es nada malo preferirlo de la otra manera.
Fuente: Siempre mujer