Este modelo fue el primero en ser conducido por una mujer y el primero que utilizó amortiguadores.
La exposición «Titanic. Enseñanzas de la gran tragedia» del Parque de las Ciencias, aparte de hacer alarde de la maqueta del Titanic más grande construida hasta el momento exhibe otra gran joya del ámbito automovilístico: un Brush D.24, fabricado en Michigan (EE. UU.) en el año 1909 por los hermanos Brush, (que fueron también los diseñadores del Cadillac).
Es uno de los coches más antiguos del mundo, que aún puede circular y que posee también el reconocimiento de ser el primer modelo en ser conducido por una mujer y el primero que utilizó amortiguadores. Este vehículo estaba preparado para hacer su ruta europea de presentación en las ciudades de Londres y en París. Para ello, se había previsto que embarcara en las bodegas del Titanic, en el supuesto viaje de vuelta del barco desde Nueva York a Southampton, el día 18 de abril de 1912, preparado desde una semana antes en los tinglados del puerto de Nueva York para ser cargado en el Titanic. Pero el hundimiento del buque truncó esta planificación y, dado que el Titanic nunca llegó a Nueva York, el coche fue embarcado en su buque gemelo, el Olimpic, un mes más tarde de lo previsto.
En mayo de 1912, el Brush D.24 fue presentado en Londres y, un mes más tarde, en Paris. Su precio, 639 dólares, suponía una pequeña fortuna para aquella época, teniendo en cuenta que el salario medio semanal era de 7,5 dólares.
El también llamado «coche del Titanic», propiedad de la Fundación Titanic, está equipado con un motor mono cilíndrico de 10 caballos, que le permiten alcanzar una velocidad de 36 kilómetros por hora —en su tiempo, el límite de velocidad era de 23 kilómetros por hora—, pesa 368 kilos y fue el primer coche que utilizó amortiguadores en lugar de ballestas.
Además, fue el primer automóvil en cruzar el continente australiano y el primero de la historia que condujo una mujer, la norteamericana Alicia Huyler, que recibió este regalo de su padre el día de su 21º cumpleaños.

